¡Qué cachondos sois!
Yo aun no había escrito porque nos quedamos allí a dormir y hemos llegado a casa anoche después de hacer un poco de turismo en el viaje de vuelta.
Como siempre, hemos salido a tope de nutrientes de la Allandesa, ¡qué forma de comer!
Y como no puede ser de otra manera, os doy muchísimas gracias a todos los que habéis acudido a esta peculiar concentración y sobretodo a Don Pablo por organizarlo y coordinarlo todo y por hacerme la revisión anual de mi carburador, que desde que me lo mima él, funciona mejor que una moderna inyección directa de última generación.
¡Qué bonito es soñar! Muchas gracias Ramón por retomar este tema y empezar a contar lo bien que lo pasamos.
Un saludo.